Hay días que estas cerca
y te siento lejana,
hay días que estás lejos
y te siento dentro de mi.
Quisiera apoderarme del vacío de tu mirada,
deshacer estas olas de vértigo,
y bailar en nuestros sueños de humo y niebla,
amarte eternamente
envueltos en gotas azules,
y lanzar mas allá de la noche estrellada
tu mirada de lágrima rota,
que escucha nostalgias de ojos de invierno.
Intento que mi sonrisa,
envuelva tu cálida piel,
y convierto con mis palabras
tus atardeceres,
para que sean solo un perfume,
con sabor a beso
a primavera mojada.
Sé que romperé este bosque ,
de hojas ásperas,
y convertiré tu corazón,
en un mar de aire desnudo,
en un eterno beso húmedo,
en un crepúsculo lleno de rocío,
donde el fuego devorador de tus ojos,
darán vida a nuestra vida,
y harán de cada día un cielo,
llenando de pasión,
el vacío de tu mirada.
Escrita en Granada en Marzo de 2004
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