Amamos en el otro,
la sombra de amor
que siempre nos persigue.
Escarchas de seda,
espumas de sueños,
sendas que ansiamos
como la sonrisa del beso.
Amamos en el otro,
nuestro propio ser reflejado,
que como un rayo de luna,
nos envuelve,
en perfumes de amor,
corazón,olvido,
como noches de verano
o perfumadas noches de primavera.
Amamos en el otro,
el rumor de la vida,
la ilusión delirante
del abrazo amante,
el beso donde se pierden las bocas,
como caricias de rocío,
abrazados a la música de la noche.
Crepúsculo de rosa,
mi amor,
que duermes sonriente en el ocaso,
envuélveme siempre en tu
jardín silencioso,
donde las hojas descansan
en tu mirada de agua,
más allá del momento,
de la espuma azul
o de las nubes de tus sueños.
Granada, Julio de 2005
tus poesias son como tus imágenes, infinitas con alma.
ResponderEliminarson un bálsamo para el espíritu, yo entro muchas veces y me recreo leyendo aunque no haga comentario.
Besos Enrique
........ envuélveme siempre en tu
ResponderEliminarjardín silencioso
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Una mano llena de esperanza y un cheque en blanco!!!!!!!!!!!!
Un placer Enrique